6 de febrero de 2009

Feng shui

Ordenar la casa equivale a limpiar tu vida. A medida que te liberas de pertenencias viejas o inservibles que te atan al pasado, dejas espacios libres para que otros elementos u oportunidades deseadas ocupen su lugar. El arte chino del Feng Shui se ha aplicado satisfactoriamente desde la Antigüedad. El objetivo del F.S. es fomentar el flujo suave de energía chi en la casa y distribuir el mobiliario de la forma más auspiciosa posible. Si abunda el desorden, este flujo energético se interrumpe o ralentiza, lo cual, con el tiempo, puede perjudicar la salud y bienestar de sus moradores. Ordenar los espacios constituye el primer objetivo del F.S., un proceso de un asombroso poder que propicia una serie de cambios extraordinarios en la vida.

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